Nuestro alimento sano está en riesgo, la única política específica estatal para el sector puede desaparecer
Aunque el territorio denominado Argentina es el segundo más grande de Latinoamérica con 2.780.000km2 y uno de los países con mayor superficie cultivable disponible con 39.2 millones de hectáreas y ocupa tercer lugar de exportación netas de alimentos US32 mil millones (después de Brasil 76 mil millones y Holanda US33 mil millones), más del 30% de quienes habitamos este territorio vivimos bajo inseguridad alimentaria grave.
Entre los problemas que más impactan en la salud humana, vinculados a la alimentación, se encuentra el exceso de peso, principalmente por el consumo de alimentos ultraprocesados elaborados por empresas. La obesidad afecta especialmente a jóvenxs pobres entre 0 a 14 años.
Diez empresas acaparan hasta el 85% de las ventas a través de supermercados e hipermercados. Sólo dos de estas empresas Arcor y Molinos del Río de la Plata, obtuvieron una evolución de sus ganancias brutas del 112% durante el bienio 2020-2021, mientras los precios de los alimentos incrementaron en ese mismo período un 114%.
La mayoría de la población depende de sus ingresos para acceder a los alimentos, pero el 36,5% de las personas son pobres. En este sentido, la inflación tiene un impacto directo en la SOBERANIA ALIMENTARIA.
La importancia de la Agricultura Familiar Campesina e Indígena
¿Por qué es importante la Agricultura Familiar Campesina e Indígena? Según el censo del 2010 sólo el 8,1% es población rural. Sin embargo, las explotaciones agropecuarias familiares garantizan: el 87% de las verduras y hortalizas, el 90% dela yerba mate, el 81% de los frutales, el 90% de la papa, más del 90% dela carne caprina.
El INAFCI (Instituto Nacional de la Agricultura Familiar Campesina Indígena) es la única política estatal específica para este sector, pero sus 1.000 trabajadrxs siguen reclamando el pase a planta permanente y condiciones dignas para desarrollar su trabajo.
El macrismo despidió a 700 trabajadorxs, a pesar de que con la lucha se logró la reincorporación de la mayoría, aún quedan algunxs sin recuperar su fuente laboral. A pesar de tener 30 años de antigüedad como institución el 100% siguen precarizadxs.
Ante las amenazas cotidianas de achicamiento del Estado, y en el caso de Milei directamente la eliminación de gran parte de él, lxs trabajadores del INAFCI dicen: “queremos revalorizar la importancia de nuestro trabajo para seguir fortaleciendo al sector que más empleo genera en el campo, que produce alimentos sanos y que resiste la concentración de la tierra”.
Lxs trabajadorxs organizadxs en ATE (Asociación de Trabajadorxs del Estado) sintetizan en un lema una manera de concebir la problemática: “POR TU DERECHO AL ALIMENTO, MÁS ESTADO Y MENOS MERCADO».
A continuación se adjunta video y comunicado elaborado por trabajadorxs de ATE INAFCI: