Cuando el río no encuentra su cauce normal tiende a desbordarse por los dos costados. El modelo bipartidista en Estados Unidos, sumado a la crisis financiera internacional que tuvo su epicentro en el mismo imperialismo yankee, hoy no es la respuesta.
El lunes 25 de julio de 2016, la convención del Partido Demócrata coronó a Hillary Clinton como candidata a las presidenciales, sucedió lo que todos esperaban, Bernie Sander su contrincante llama a votarla, en una especie de mal menor, a Hillary en las elecciones para que no gane Trump.
Lxs delegadxs
Las tendencias hacia posiciones más radicales de izquierda y derecha en el mundo, también se notan en el corazón del capitalismo norteamericano. Es que lxs delegadxs de Sanders, cuando pronunció, que en las elecciones generales había que votar a Hillary empezaron a abuchearlo lxs delegadxs propios. Desde el atril, Sanders les replicaba que no podía ganar Trump. Esto muestra a las claras que la “revolución política”, era de sabana corta, llegaba hasta la candidata del establishment. Otra hubiera sido la situación si Sanders se presentase, como lo permiten las elecciones estadounidenses, a modo de candidato independiente.
“el partido demócrata, con sus superdelegadxs de por medio, es irreformable.”
Lxs delegadxs al grito de “no TPP” (no al Tratado del Transpacífico) muestran a las claras que tanto Clinton como Trump, son lxs representantes del uno por ciento de la población, y que sectores amplios de trabajadores están haciendo una experiencia política, en la que se chocan con que el partido demócrata, con sus superdelegadxs de por medio, es irreformable.
Las tendencias suelen ser irreversibles.
Si algo está claro es que existe una polarización hacia izquierda y derecha a nivel mundial, véase las elecciones en Austria, el Brexit que pone de ganador al partido xenófobo UKIP, el Frente Nacional en Francia con Marie Le Pen a la cabeza, Aurora Dorada en Grecia, Alternativa Alemana en Alemania, el mismísimo Trump en EE.UU, el golpe en Brasil o el gobierno de Macri como expresiones de derecha.
“tendencias hacia la izquierda en amplios sectores de trabajadorxs ocupadxs como desocupadxs”
Pero existen tendencias hacia la izquierda en la que amplios sectores de trabajadorxs ocupadxs como desocupadxs, están haciendo una experiencia política como hace años no se había visto, y claro está, que sucede producto de la crisis capitalista en su modo financiero que comenzó 2007/2008. Jóvenes atacando bancos en Inglaterra, las plazas en las Revueltas Árabes, el 15M español con su correlato político en Podemos, Syriza en Grecia, la elección de Corbyn como líder del Partido Laborista en Inglaterra, la lucha de los docentes en México y el movimiento alrededor de la figura de Sanders, muestran como la experiencia en la centroizquierda o socialdemocracia son un fiasco y que no salen de los marcos de acción que permite la democracia burguesa, para terminar en las viejas recetas que venían fracasando.
Hoy urge unir a la izquierda clasista con independencia política del Estado como de los partidos burgueses, para encaminarse a ganar el amplio espectro que empieza a cuestionar que los proyectos socialdemócratas van hacia la debacle, y que solo la lucha por la Revolución Socialista es el camino para acabar con la desigualdad mundial.
