Acampe en la planta San Lorenzo

Trabajadores y sus familias mantienen un acampe en las puertas de la fábrica, en enero pasados la empresa decidió cerrar las puertas dejando a mas de 140 familias en la calle.

La planta que supo aprovechar los beneficios de la Promoción Industrial en los 80, se convirtió en una de las importantes del país. En 2016, se produce la fuerte caída de la demanda haciendo que la producción supere los límites del stock, la gerencia comenzó los planes de suspensión rotativos. A mediados de ese año, es adquirida por el grupo inversor Lamosa, quien decide sacarla de competencia.

Los cierres en 2017, se sintieron en la planta de Azul (Buenos Aires), San Juan y en Puerto Madryn (Chubut). En Villa Mercedes, luego de recibir los telegramas de despidos, los trabajadores acordaron en asamblea mantener un acampe. Existe el temor que el grupo inversor realice el vaciamiento de la planta, con ese panorama, los trabajadores esperan que el gobierno provincial realice una expropiación, conformando cooperativas que beneficien a las más de 140 familias. El mismo destino tendrían las plantas de Herzo y Georgalos, fábricas que en menos de tres meses fueron afectadas por la crisis.