Adriana y Hugo, vecinxs del Barrio República se acercaron a #LaBulla para contarnos la terrible situación que tuvieron que vivir junto a un grupo de vecinxs del barrio.
El miércoles 26, a eso de las 2 de la madrugada, cuando Hugo saludaba a su amigo luego de ver un par de películas, aparece un móvil policial frente a su casa. El móvil se detiene y le piden que se identifique. Hugo accede, muestra su DNI y se deja requisar. Según dijeron los tres efectivos del Comando RadioEléctrico, buscaban a un joven de pantalón rojo y pelo largo. Hugo y su amigo no responden a esas caraterísticas, de todos modos son violentados, perseguidos por la policía, quien apunta y dispara balas de goma. Hugo corre a la casa de su vecina, Adriana. Ella le abre la puerta para resguardarlo del abuso de autoridad y de la violencia que sufría por parte de los efectivos policiales.
La policía ingresa a la casa de Adriana y a patadas rompe la cocina, lo que produjo pérdida de gas, poniendo en peligo la vida de ella, de Hugo, de una mujer embarazada de 7 meses y de 4 niñxs que se encontraban en la vivienda.
Luego vienen más efectivos y con total violencia y sin causa alguna demoran a 4 jóvenes, uno menor de edad. Dos de ellos aún siguen demorados en la Comisaría Cuarta. Están siendo golpeados y no explican la causa de la demora, pese a la presentación de un abogado de las familias los detenidos.
«Tengo que vivir encerrado ahora, porque me dijeron que me iban a meter algo para mandarme preso a mí», dice Hugo, quien tiene impactos de balas de goma y de plomo. Su pierna recibió más de 7 impactos de goma y un roce con bala de plomo, por lo que camina con dificultad. También le tiraron 6 tiros al perro de la casa..
«Si la policía tiene que trabajar, que lo haga como gente, no como animales. Entraban tirando tiros, patearon la puerta, rompieron la garrafa y se bañó todo de gas mi rancho», nos comentaba Adriana mientras recordaba que sus nietos se escondieron en el placard por el peligro de la pérdida de gas. En ese momento los policías se alejaron y desde la calle uno de ellos gritó: «Voy a venir y te voy a prender fuego todo el racho». Al tiempo que trabaron la puerta desde afuera para que la familia no pudiera salir de la vivienda.
Una hora y media de terror vivió esta familia, mientras lxs demás vecinxs observaban sin poder hacer nada ya que los efectivos tiraban tiros al aire para impedir que hubiese testigxs de lo que estaban haciendo.
Gatillo fácil, la modalidad de la Comisaría Cuarta y del Comando RadioEléctico
Efectivos del Comando RadioEléctrico y de la Comisaría Cuarta fueron los involucrados en este bestial y abusivo prodecimiento. Mario Navarro, del Comando RadioEléctrico es uno de los identificados por lxs vecinxs.
Frente a tanto abuso de autoridad, impunidad y violencia por parte de los efectivos policiales, Hugo dice: «Estamos esperando que larguen a mi hermano, por las dudas que le pase algo, y de ahí nos vamos a Fiscalia para hacer la denuncia. Hay muchos vecinos que van a declarar. Fácil 30 vecinos que estuvieron viendo todo».
Mientras tanto, Adriana recuerda las palabras de uno de los efectivos: «En estos rachos de mierda no necesitamos orden de allanamiento. Nosotros entramos a la hora que queremos y cuando queremos. Y si tenemos que matar, matamos».
Compartimos el diálogo completo mantenido con Adriana y Hugo: